En términos generales, en la Comarca de El Condado el mercado de trabajo se caracteriza fundamentalmente por tres problemas: el subempleo, la temporalidad del empleo y la extensión de las actividades sumergidas.Las características del tejido productivo local (alta dependencia de las actividades agrarias, elevada concentración de la propiedad de la tierra, predominio de un modelo agrario basado en el monocultivo del olivar, elevado peso en términos de empleo de actividades agrarias que generan mayoritariamente trabajo temporal y una estructura productiva poco diversificada) explican porqué el paro en la Comarca es muy superior, en términos comparativos, al del conjunto de España.La tasa de actividad, permite entre otros aspectos, medir el grado de dependencia económica de la población en un ámbito territorial.En la Comarca el 40,02% de la población es activa, 10.035 habitantes (Ver Tabla 25), es decir, productora de bienes y servicios (población ocupada) o disponible para incorporarse a dicha producción (población parada). Este porcentaje es sensiblemente inferior al provincial (40,13%) y al andaluz (43,98%).A pesar de este porcentaje inferior respecto a la media provincial y andaluza, si se revisa la tasa de actividad, en total del 50,67%, se observa que ésta es ligeramente superior a la provincial (48,89%) y a la andaluza (50,41%). Este hecho, más acusado en algunas poblaciones, lamentablemente no responde a un mayor porcentaje de población ocupada, sino al peso del desempleo en la Comarca, el cual, como se verá más adelante, afecta con mayor intensidad a las mujeres; y al alto porcentaje de población activa perceptora del subsidio agrario.A escala municipal, los municipios de Sorihuela del Guadalimar, Montizón y Santisteban del Puerto son los que muestran las tasas de actividad más elevadas. Por el contrario, en el extremo opuesto, Chiclana de Segura, Vilches o Arquillos, mantienen tasas muy reducidas que evidencian la existencia de un elevado número de personas económicamente dependientes.Desde una perspectiva de género existen divergencias en cuanto a actividad tanto en la provincia y la Comarca, como entre municipios, tal como puede observarse en el Gráfico 14.
En las tres escalas, la tasa de actividad es notablemente superior en hombres que en mujeres, debido fundamentalmente a que muchas mujeres continúan dedicándose a las tareas domésticas, sin incorporarse al mercado laboral.No obstante, es preciso señalar que la situación ha mejorado bastante si se compara con datos del anterior censo de población de 1991, en el que la tasa de actividad de la mujer era del 17,41% y la de los hombres del 66,48%, destacando municipios como Arquillos con una tasa de actividad en mujeres del 6,31%. La tasa de actividad total en la Comarca era de 41,94%Como se ha mencionado anteriormente, el hecho de que la tasa de actividad de la Comarca sea superior a la provincial y a la andaluza no significa necesariamente un mayor porcentaje de población activa ocupada. En efecto, si se realiza una comparación entre los niveles comarcal, provincial y andaluz, tal como puede observarse en la Tabla 26 y en el Gráfico 15, el porcentaje de población activa ocupada a nivel comarcal es inferior al provincial y al andaluz y por el contrario el porcentaje de población activa parada es superior.
Realizando una comparación por municipios, se observa que en todos los municipios el porcentaje de población activa ocupada es superior al de población parada, a excepción del municipio de Montizón (uno de los que presentaba la mayor tasa de actividad de toda la Comarca) en el que el porcentaje de activos parados (60,45%) es superior al de ocupados. Destacan en el extremo opuesto los municipios de Chiclana de Segura (89,29% de la población activa está ocupada) y Vilches con un 82,90% de su población activa ocupada.En la distribución por sectores económicos de la población ocupada, cabe destacar que el sector agropecuario es el que ocupa a más personas, concretamente al 41,2% de la población ocupada, correspondiendo el 83,5% de este porcentaje a mano de obra masculina. El siguiente sector que emplea más mano de obra es el sector servicios, seguido del sector de la construcción y por último el sector industrial (ver Tabla 27).Distribución de la mano de obra por sectores económicosNo obstante, existen algunas diferencias entre municipios. Chiclana de Segura es el municipio que más mano de obra concentra en el sector agropecuario, a más del 60%. Por el contrario, Vilches, el que presenta mayor dinamismo empresarial, es el que menos mano de obra concentra en este sector (25,4%), siendo el municipio con el mayor porcentaje de población ocupada en el sector industrial (21,9%) y en el sector servicios (40,2%) junto con Santisteban del Puerto. (ver Gráfico 17).
En cuanto a la distribución según sexo (ver Gráfico 18) de la población ocupada, la mayor parte del empleo femenino, a nivel comarcal, se concentra en el sector servicios, puesto que la construcción apenas ocupa a mujeres y cuando lo hace es en labores administrativas. En el caso del sector agropecuario, a pesar de ser el que en términos absolutos genera mayor ocupación, son los varones los que se benefician de esta situación.
Un dato característico del mercado de trabajo de la Comarca, es el alto porcentaje de población ocupada en el sector agropecuario y en concreto en la actividad olivarera, caracterizada por su carácter temporal. De hecho, en el año 2001, tal como puede observarse en la Tabla 28, 4.058 de las personas ocupadas en la Comarca eran trabajadores eventuales.
Estas cifras, representadas de forma gráfica (Gráfico 19) muestran que más del 50% de la población ocupada se encuentra en una situación eventual, evidenciando la dependencia de la Comarca de un sector que apenas genera empleo duradero, o al menos no suficiente.
Otro rasgo del mercado de trabajo de la Comarca, junto con el carácter temporal del empleo, es el elevado número de personas que a lo largo del año cobran el subsidio para trabajadores eventuales del Régimen Especial Agrario de la Seguridad Social (ver Tabla 29).
En concreto, el 19,5%, del total de la población activa de la Comarca recibe el subsidio agrario. Como municipios más subsidiados y dependientes, destacan Arquillos y Montizón con un 26,4% de su población activa subsidiada y Santisteban del Puerto y Chiclana de Segura con un 22,4 y un 22,3% respectivamente. Por otro lado, es muy significativo que el municipio más dinámico desde el punto de vista económico y demográfico, Vilches, muestre el menor porcentaje de población dependiente del subsidio.Si se estudia este factor estableciendo una diferenciación por sexo, se puede determinar que las mujeres son más receptoras del subsidio agrario que los hombres de la Comarca. En el año 2001, de un total de 3418 mujeres activas, 1112 recibieron el subsidio agrario, es decir, el 32,5% de la población femenina activa, frente a un 12,7% de hombres activos perceptores del subsidio. En el Gráfico 29 se puede comprobar como existen municipios en los que el porcentaje de mujeres activas perceptoras del subsidio agrario es superior a la media comarcal. Destaca Arquillos, con un 66,3% de mujeres activas con subsidio.En la Comarca, como se ha podido comprobar existe cierta dependencia del subsidio agrario. De hecho, se ha llegado a desarrollar una “cultura del subsidio” que, mediante un uso fraudulento de esta ayuda, obstaculiza en buena medida el desarrollo de propuestas innovadoras, dando lugar a la proliferación de situaciones de subempleo y actividades sumergidas. Esta cultura genera una mentalidad pasiva y de cierto inmovilismo frente a las opciones de búsqueda de trabajo y más ante las posibilidades de fomentar el autoempleo. Es un factor estrangulador para el desarrollo de iniciativas y, en general, para la puesta en marcha de proyectos emprendedores e innovadores.Por último, para finalizar la caracterización del mercado de trabajo comarcal se realiza a continuación un repaso de la situación del desempleo en la Comarca.El paro es, probablemente, el principal problema de Jaén, puesto que la provincia mantiene, desde hace años, una de las mayores tasas de desempleo de España y Europa, circunstancia que, pese a la disminución del número de parados registrados en los últimos años, se mantiene en la actualidad. En la Comarca se reproducen la mayoría de las cuestiones del conjunto de la provincia, además, debido al gran peso del sector olivarero, el paro en El Condado se mantiene en tasas elevadas, abundando, como se ha revisado anteriormente, el empleo temporal y un alto porcentaje de personas receptoras del subsidio agrario.El la Tabla 30 puede observarse la situación que presentaba la Comarca en el 200, año, como se ha mencionado anteriormente, en el que se realizó el último censo de población.
La tasa de paro comarcal es superior a la provincial (en siete puntos) y a la andaluza (en cinco puntos). En las tres escalas existe diferencia entre la tasa de paro de hombres y mujeres (en perjuicio de éstas), sin embargo, en el caso de la Comarca, la tasa de paro femenina (48,3) duplica a la masculina (18,1).Esta tasa de paro no se comporta de igual manera en todos los municipios. Montizón y Sorihuela del Guadalimar superan ampliamente la tasa de paro comarcal, con un tasa del 60,5% y 40,2% respectivamente. En el extremo opuesto, Chiclana (10,7%) y Vilches (17,1%) son los que presentan una menor tasa de paro.Esta situación de desigualdad también se da entre sexos. Tal como puede observarse en el Gráfico 21, en todos los municipios la tasa de paro femenina es bastante más alta que la masculina, sin embargo, en municipios como Santisteban del Puerto, Montizón y Sorihuela del Guadalimar la tasa de paro en mujeres es superior a la masculina, 42,1, 39,8 y 36,9 respectivamente.
En los últimos años el paro en la Comarca, tal como puede observarse en el Gráfico 22, ha ido en aumento, pasando de 496 en 2001 a 730 en 2006. Por otro lado, observando la pirámide del número de parados por sexo y edades para ambos años (Gráfico 23 y Gráfico 24) se puede ver la situación para ambos años por edades y sexos.
En ambos casos, se aprecia que el número de parados es notablemente mayor en mujeres que en hombres y que se concentra fundamentalmente en edades entre los 20 y los 44 años. Ahora bien, la evolución del desempleo muestra algunas diferencias en función de la edad y el sexo de los afectados, detectándose una clara tendencia a un aumento entre los más jóvenes (16-24 años). En los grupos de edades comprendidas entre los 20 y 29 años la proporción de varones también disminuye, mientras que la de mujeres permanece estable, e incluso, aumenta.Otra característica general derivada de las tendencias de los últimos años es el progresivo reforzamiento del paro femenino en los estratos más jóvenes de población y entre las personas en edades activa y fértil, de manera que es mayor la proporción de paradas que de parados entre los más jóvenes y entre quienes tienen edades comprendidas entre los 24 y los 35 años.En definitiva, en El Condado, al igual que sucede en el conjunto de España, el desempleo afecta con mayor intensidad a la población joven. Por otra parte, y como también sucede en el conjunto de España, el paro en El Condado afecta en mayor medida a las mujeres, teniendo además en cuenta que la población activa masculina casi duplica a la femenina. En este sentido interesa señalar que la mujer en El Condado tiene mayores problemas que el hombre para acceder a un empleo, entre otras razones porque la Comarca muestra una estructura productiva tradicional muy dependiente de actividades “masculinizadas” como son la construcción, el olivo y la ganadería. Así, a excepción del comercio minorista y los servicios (sectores con poco peso en la economía local salvo en municipios como Navas, Vilches y Santisteban) y el trabajo temporal en la recogida de aceituna, la mayoría de las actividades agrarias, industriales y se servicios son desempeñadas tradicionalmente por varones.