Conocer, analizar y diagnosticar la población constituye un elemento básico en la labor de planificación de las administraciones o grupos de acción que tienen competencias en materia de desarrollo socioeconómico sobre un territorio. El conocimiento de las características y evolución de los componentes demográficos, tendencias, estructura y características de la población, se convierten en el punto de partida de un análisis cuyo objeto es establecer el marco sobre el que han de orientarse las propuestas de desarrollo, porque, directa o indirectamente, el beneficiario final de toda acción panificadora y de desarrollo es la población del propio territorio. En las últimas décadas, en muchos de los pueblos de la provincia, la tendencia ha sido la disminución relativa de la población rural a favor de un aumento de población urbana. Este hecho ha estado muy relacionado con el cambio de estructura socioeconómica, es decir, con el paso de la población agrícola a la industria y los servicios, acrecentándose la inmigración urbana.La Comarca de El Condado, con 25.127 habitantes repartidos en 8 municipios (Padrón 2006) y una extensión superficial de 1.547Km2, es junto con la Comarca de la Sierra de Segura, el territorio menos poblado de la provincia de Jaén. Su baja densidad de población de 16,2 habitantes/Km2, contrasta con la densidad de la provincia, 49,2 habitantes/Km2, y con la que presenta la Comarca de la Sierra Sur, la cual a pesar de tener una extensión superficial algo inferior a la de El Condado, concretamente 1420Km2, tiene la mayor densidad de población de toda la provincia, 66,6 habitantes/Km2, aunque ésta y la provincial es inferior a la ocupación media del territorio andaluz, 91 habitantes/km2.En la Comarca de El Condado existen diferencias importantes en grado de ocupación del territorio entre los municipios que la componen (ver Tabla 56). En un extremo destaca Chiclana de Segura y Montizón, con una densidad de 5 y 9,3 habitantes/Km2, respectivamente y en el otro, Arquillos (30,5 hab/Km2) y Navas de San Juan (28,8 habitantes/Km2).
La Comarca de El Condado, es desde un punto de vista demográfico, una comarca de marcado carácter rural. Se trata de un territorio en el que ningún municipio ha sobrepasado, ni siquiera se ha aproximado, en todo el transcurso del siglo XX a la cifra de 10.000 habitantes. En la actualidad, de los ocho municipios que lo componen dos apenas alcanzan los 5000 habitantes y tres de ellos no llegan ni a los 2000 habitantes. (Ver Tabla 57).
Al igual que ocurre en la provincia, la Comarca ha experimentado un fuerte proceso de pérdida de población desde principios del siglo pasado, momento en el que contaba con 30.304 habitantes (1910) (Ver Gráfico 40). A partir de este momento la población no dejó de crecer (contando en 1940 con 43.382), hasta que en la década de los 50-60 comienza una disminución acelerada (entre 1950 y 1981). El descenso de población fue de más de 15.000 habitantes en 20 años, dejando en 26.582 habitantes los efectivos existentes en la Comarca en 1981. Este cambio de tendencia, de ruptura demográfica de la población tras la guerra civil, fue debido a la corriente emigratoria masiva que sufrió Andalucía en general y la provincia de Jaén en particular, cuyo objetivo no era otro que la búsqueda de un puesto de trabajo en zonas más prósperas del país. Una gran parte de la población se trasladó a las poblaciones del cinturón industrial de Barcelona y a Levante.
A partir de los años 80 la población de la Comarca sigue decreciendo pero a menor ritmo, experimentando a partir del año 2001, tal como se puede observar en el Gráfico 41, un ligero aumento, llegando hasta nuestros días con 25.127 habitantes (2006).Dentro de la Comarca, tal como se puede observar en el Gráfico 42, existen municipios que siguen la tendencia comarcal de estancamiento con un ligero aumento, como son Arquillos, Castellar, Santisteban del Puerto y Vilches. En el resto la tendencia es de regresión paulatina, siendo los municipios de Sorihuela del Guadalimar y Chiclana de Segura los que mayor porcentaje de población han perdido en los últimos años, el 7,1% y el 1,9% respectivamente, de 2001 a 2006.
Como ha quedado patente, la Comarca en los últimos 5 años ha experimentado un ligero aumento de población, concretamente desde 2001 a 2006, ésta ha aumentado en un 1,5%. Sin embargo, la Comarca sigue perdiendo población, el saldo migratorio sigue siendo negativo (Ver Tabla 58), según los últimos datos del padrón del 2006 en todos los municipios, siguiendo la tendencia provincial.
Por otro lado, pierde población en términos de reemplazo biológico, presentando un crecimiento vegetativo negativo, de -37 en el año 2005 (Ver Tabla 59), es decir, el número de defunciones es superior al número de nacimientos.
La natalidad es uno de los factores clave en el comportamiento demográfico actual pues su retroceso en los últimos años, junto con un aumento de la esperanza de vida, está contribuyendo a un envejecimiento poblacional que queda reflejado en la pirámide de población que se presenta el Gráfico 43.
La pirámide de población muestra una estructura demográfica que tiende a ensancharse por la cúspide y a estrecharse por la base. De la distribución de la población por sexo se observa que la tendencia de la Comarca es similar a la provincial, destacando los siguientes hechos:
- La Comarca se encuentra en una situación equitativa en cuanto a sexo se refiere, un 49% de su población lo constituyen mujeres y un 51% hombres.
- El porcentaje de población menor de 15 años es del 15,6% y el de población mayor de 65 años de 20,6%. El resto de la población se concentra en edad reproductora.
- La esperanza de vida es mayor en mujeres que en hombres.
En la actualidad la mayor parte de la población se encuentra en edad activa y reproductora, pudiendo afirmar que de forma generalizada la Comarca mantiene una estructura poblacional relativamente joven (aunque mayor a la provincial y andaluza), siendo la edad media de la población (Padrón 2006) de 41,3 años, dos años más que la media provincial y tres más que la media andaluza (ver Tabla 60 y Gráfico 44). No obstante, la tendencia general es al envejecimiento ya que si los nacimientos siguen siendo inferiores a las defunciones, y no se compensa parte de este efecto con un saldo migratorio positivo, llegará un momento en que la actual población con edades comprendidas entre 15 y 65 años comience a envejecer y no se produzcan los correspondientes efectos renovadores en sentido demográfico, lo que supondría un descenso importante de la población en varias generaciones.
A escala municipal, como puede observarse en el Gráfico 45, no existen grandes diferencias respecto a la estructura poblacional de la Comarca, a excepción del municipio de Chiclana de Segura y en menor medida en Sorihuela del Guadalimar. La pirámide de población de Chiclana de Segura (pirámide invertida), con pronunciado estrechamiento de los grupos de edad más jóvenes (la población menor de 15 años sólo supone un 8,9% de la población total) y un considerable volumen de población mayor de 65 años (29,3%), muestra una estructura poblacional muy envejecida en comparación con el resto de la Comarca, siendo la edad media actual de la población de 47,3 años.
Otro dato que caracteriza la estructura poblacional es la población extranjera residente en la Comarca (supone el 2,4% de la población total), siendo los municipios de Castellar (3,7%), Arquillos (3,2%) y Sorihuela del Guadalimar (3,2%) los que presentan Un mayor porcentaje de población extranjera (ver Tabla 61), porcentaje en estos tres casos superior al comarcal y al provincial.
El Gráfico 46 muestra la evolución de la población extranjera a nivel municipal, comarcal, provincial y andaluz en los últimos tres años (2004-2006). Destaca el municipio de Santisteban del Puerto en el que el porcentaje se ha duplicado y el de Navas de San Juan en el que se ha mantenido estable.
Por último, otro factor determinante en la definición del capital humano de la Comarca es el nivel de estudios de sus habitantes. Puesto que no existen datos estadísticos sobre nivel educativo de la población salvo para los años censales y a pesar de que ya han transcurrido seis años desde la elaboración del último Censo de Población y Vivienda, se han utilizado los datos que arroja el Censo de 2001, partiendo de la hipótesis de que el nivel de estudios de la población se mantiene en parámetros similares a los de aquella fecha, en tanto los cambios significativos de sta variable sólo son posibles en el medio, y sobre todo, en el largo plazo.La tasa de analfabetismo en la Comarca es del 7,9%, sensiblemente superior a la de la provincia (5,8%) y a la andaluza (3,9%) (ver Tabla 62).
En efecto, en la Comarca existe un elevado porcentaje de población analfabeta y un muy importante grupo de población sin estudios (23,4%), es decir, más del 30% de la población muestra niveles de estudios muy bajos, surgiendo dificultades para la realización de diferentes trámites administrativos y suponiendo un freno al desarrollo de la Comarca. Un 28,1% de la población ha cursado estudios primarios, un 35,5% estudios de segundo grado y sólo un 4,7% ha cursado estudios universitarios (ver Gráfico 47).
Estos datos varían si se analizan realizando una diferenciación según sexo (ver Gráfico 48), puesto que del total de población analfabeta de la Comarca, el 73,8% son mujeres, siendo la tasa de analfabetismo de las mujeres del 14,1 frente a la dehombres del 4,7%. El resto de situaciones en cuanto al nivel de estudios se reparte prácticamente de forma equitativa entre hombres y mujeres, siendo sensiblemente superior el porcentaje de población masculina con estudios de primer y segundo grado y superior el porcentaje femenino sin estudios y con estudios universitarios.